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PLANETA TIERRA
Nuestro Planeta es muy particular, como lo era el patio de
nuestra canción. ¿Recuerda que no era
como el de los demás?.
Para empezar, fíjese que la mayoría de las tierras emergidas se encuentran en el
Hemisferio Norte. Esto es muy importante no solo a la hora de entender
la distribución del calor que recibimos del Sol y que a lo largo de
nuestro Planeta, hacen la Atmósfera y los Océanos, sino también porque
tenemos que considerar los fenómenos atmosféricos y marinos que ocurren
en uno u otro Hemisferio y que son muy diferentes.
Mapas desde las Estrellas
Observe estos mapas, que son idénticos exceptuando la línea del Ecuador
dibujada sólo en el segundo de ellos. Podrá comprobar
la desproporción entre la cantidad de tierras emergidas del Hemisferio
Norte y las que hay en el Hemisferio Sur.
¿Tiene sentido esta distribución de tierras, o no es mas que una casualidad?
La verdad es que tiene que ser así. No es casualidad.
Puede que sea una causalidad que las tierras emergidas se movieran de
una u otra manera, pero la realidad es que este reparto de océanos y
continentes es muy apropiado para la estabilidad del clima y para la
vida del hombre en el Planeta.
Si hubiera ocurrido al revés, si la mayor concentración de continentes
hubiera estado en el Hemisferio Sur, la propia traslación elíptica del
Planeta al rededor del Sol hubiera provocado un gran desequilibrio
térmico en ambos hemisferios al estar la Tierra más cerca del Sol en el
verano del Hemisferio Sur y más lejos en el Invierno del mismo
Hemisferio.
En el Planeta Tierra nada es casualidad. Nosotros somos lo que somos y
como somos, por todas esas circunstancias.
Si todo fuera una casualidad, sería realmente una gran y maravillosa
casualidad.
Almacén de Energía Natural:
Visto desde el Espacio, en el Planeta se distinguen perfectamente: la
Atmósfera, El Mar y La Superficie Terrestre, pero la única superficie o
el único volumen, que es capaz de almacenar la energía que recibimos del
Sol; es decir, que tiene inercia térmica, es el MAR
¿Cómo se reparte la energía en La
Tierra?
La responsabilidad de distribuir de la energía que recibimos del Sol es
prácticamente a partes iguales del Mar y de la Atmósfera.
Ciclos Naturales
En el Planeta todo son ciclos.
Todos los ciclos forman parte de la Naturaleza, por lo que son
esenciales y muy importantes.
En realidad, exceptuando la Luz y la Oscuridad exterior, todo está dentro de
algún ciclo.
Para nosotros la Luz y la Oscuridad forman el ciclo del día y la noche,
pero si miráramos con detalle la Tierra desde el exterior, observaríamos muchos
ciclos.
El Ciclo del Carbono (CO2), por ejemplo, es uno de tantos ciclos de la Naturaleza,
aunque no es, ni con mucho, el más importante, ni sus variaciones
puntuales o sostenidas, pueden considerarse causa directa de
alteraciones de energía a nivel global.
El CO2 presente en la Atmósfera contribuye a nuestra estabilidad
térmica, pero hay que poner en cuestión que eventuales variaciones de
ese porcentaje debido a, por ejemplo, causas humanas, o a grandes
catástrofes o tragedias naturales, hayan podido tener influencia
permanente en el Clima, porque la Atmósfera nunca es el destino final de
esas emisiones.
La Energía que recibimos del Sol
Tenemos que ser capaces de contemplar, a la hora de considerar el
balance energético del Planeta, todas las alteraciones provocadas por
nuestros supuestos sistemas sostenibles de desarrollo, y de su influencia a
la hora de alterar el equilibrio natural de captación, almacenamiento y
eliminación de la energía del sol.
El Ciclo más Importante:
El Ciclo más importante de este planeta es, sin duda, el CICLO DEL AGUA.
Si todavía no se ha hecho una buena idea de cómo están divididas las
tierras en el Planeta, aquí tiene un punto de vista muy especial, con
los Polos en primer lugar.
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